Por Vasti Abarca González
La demanda de pellet ha ido en aumento con el Programa Recambio de Calefactores que impulsa el Ministerio de Medio Ambiente, especialmente con el llamado que busca a cambiar la leña por pellet en zonas declaradas saturadas por material particulado.
Entre ellas, está Valdivia, donde desde hace unas semanas se comenzaron a registrar largas filas para poder comprar el insumo que escasea estos días.
En esa línea, el plan estatal comenzó a ser cuestionado, dado que el reclamado desabastecimiento se produce cuando el recambio a pellet en las viviendas no está ni remotamente cerca de la meta que se propone el ministerio.
Hasta junio del año 2022 el avance corresponde a un 15,9% de la meta, es decir, un total de 4.146 recambios, aunque puntualmente, 3.708 corresponden a pellet dentro del Programa Recambio de calefactores.
Respecto el consumo de pellet por hogar, llega a 2,8 toneladas al año, cifra mucho mayor a la apreciada en 2019, lo cual sería producto de la pandemia, según la Seremi de Energía regional.
Además, puntualiza que en 2020 se consumieron 12 mil 500 toneladas de pellet en Los Ríos, lo cual representó un 8% del total del consumo de pellet a nivel nacional para ese año. En tanto, en 2021 se consumieron 10.137 toneladas, correspondiente al 5% del consumo en Chile.
El programa tuvo su peak en 2021, cuando se realizó el recambio de 1.615 calefactores en la zona, cifra que baja bruscamente a 488 en lo que va de este año. En tanto, el 2020 se registraron 651 recambios y 343 en 2019.
El Plan de Descontaminación Atmosférica de la comuna de Valdivia considera una meta de 26 mil recambios de artefactos a leña, en un plazo de ocho años, es decir, hasta junio del año 2025, según informa la Seremi de Medio Ambiente de Los Ríos.
Aunque el proceso avanza lento desde que comenzó en 2017, la demanda por pellet ya supera la oferta, y no pareciera verse matizada por estos bajos números de recambio.
El programa estatal ofrece el recambio de un artefacto del tipo “salamandra, cocina, hechizo, cámara simple y calefactores con templador”.
La promesa en Valdivia es renovar con calefactores a pellet de una potencia entre 7 a 10 Kw, que en el mercado se pueden encontrar por alrededor de 800 mil pesos, mientras que el programa establece un copago de 100 mil pesos, que se puede pagar con tarjeta de crédito y hasta en seis cuotas sin interés.
Según detalla el Ministerio de Medio Ambiente, el objetivo de este programa “es disminuir las emisiones contaminantes al aire, a través del recambio de calefactores a leña, instalados en viviendas (…) por calefactores más eficientes y menos contaminantes".
Para Carmen Leyton, ingeniera de Proyectos y Estudios del Centro de Sistemas Públicos (CSP) de la Universidad de Chile, el programa estatal tiene un buen fin, pero con deficiencias.
Leyton explica a Grupo DiarioSur que entre 2018 y 2019, el CSP realizó un estudio encargado por la Dirección de Presupuestos de Chile (Dipres), donde se identificó que el plan de recambio avanza de manera lenta en las “ciudades más críticas”, como Osorno, Coyhaique y Valdivia.
“Ocurría porque lo que se hacía en ese tiempo era cambiar un artefacto absolutamente rudimentario de calefacción por una estufa a pellet que en el fondo ambientalmente son mucho mejores, pero requieren un montón de condiciones como el abastecimiento de pellet”, explica.
Leyton asegura que entre las recomendaciones que se hicieron, estuvo el “no solo apuntar hacia medidas de calefacción que fueran en contra de todo lo que sea madera”.
“En ese sentido propusimos que se evaluara la posibilidad de hacer una estrategia mixta con estufas o calefactores que pudieran utilizar madera seca junto con estas otras estufas a pellet y las eléctricas”, puntualiza.
Según Leyton, el estudio realizado por CSP, identificó que “no solo la tasa de avance del programa de recambio de calefactores era un punto crítico, sino también las condiciones de las viviendas de las personas de los lugares más sureños y australes”.
“Yo creo que muchas personas que hicieron el recambio a pellet ahora están pensando en volver a la calefacción más tradicional”, comenta.
La Asociación Chilena de Biomasa (AChBIOM) ha explicado que la escasez de pellet se debe a la menor producción de este producto en la zona centro sur, debido a la baja actividad de la industria maderera aserrada, lo que se tradujo en la falta de materia prima para combustible, como aserrín y virutas.
La asociación también agregó como un factor de la escasez, la problemática que se registra en la macrozona sur.
El director de la Escuela de Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales de la Universidad Austral, Francisco Burgos, puntualiza en que la producción de pellet está concentrada en una región, por lo que ve complicado el futuro si no se diversifica la oferta con mayor fuerza.
“El pellet se fabrica en la Región del Biobío y la materia prima proviene de la industria de la madera, no de la industria forestal, viene de una troza y una tabla por ejemplo”, asegura a Grupo DiarioSur.
“En el Biobío hay muchas empresas que exportan madera, por lo tanto tienen mucho de ese residuo”, agrega Burgos, apuntando a que se trata de una ventaja para el Biobío pero no para otras regiones como Los Lagos o Los Ríos.
En ese sentido, Leyton propone que “lo que se debe asegurar es diversificar el mercado de proveedores”.
“Que esté focalizado solo en el Biobío no es muy sustentable tampoco en términos ambientales por el tema del transporte y obviamente los problemas de desabastecimiento que se están generando”, sostiene.
Leyton dice que “es una medida que se debe evaluar en términos de costo/efectividad para ver si realmente hay que seguir esta estrategia o cambiar a otra que puedan avanzar en conjunto, como una política pública para mejorar la aislación”.
En tanto, el ministro de Energía, Claudio Huepe, ha explicado que actualmente hay una “una relativamente baja en la producción”.
Se trata "del 8% por debajo del objetivo ideal que deberíamos tener, y por lo tanto efectivamente las personas están teniendo algunas dificultades para acceder al pellets”, explica.
Por su parte, Antonio Minte, gerente de la Asociación Chilena de Biomasa, ha entregado su punto de vista sobre las razones detrás de la problemática.
“Lamentablemente, estamos viendo un periodo de restricción de materia prima para la industria del pellet y eso nos ha llevado a disminuir la producción. Entonces llegando el invierno se ha traducido, debido a la alta demanda, en la falta de stock, lo cual hace que dependamos 100% de la distribución y producción diaria", explicó.
Cecilia López es una de las arrepentidas del uso de pellet como calefacción en su casa en La Unión. Comenta que tenía una combustión lenta que alimentaba con leña y que cumplía con su misión, pero la cambió.
“No hay pellet y para tener una casa calefaccionada, debes contar con una buena carga. Volví a la antigua combustión lenta. Ahora no la cambio. Uno enciende el fuego, coloca un trozo de leña grueso y el calor se mantiene”, dice a Grupo DiarioSur.
Por su parte, Mauricio Mansilla, valdiviano que usa pellet, también entregó su punto de vista mientras hacía fila para comprar en Comercial Arcos.
“Es un problema que se haya potenciado tanto el proceso de cambio a este sistema de combustión, que efectivamente genera una de tipo más limpia que la tradicional, sin embargo la quiebra de stock demuestra que no estábamos preparados para hacer una transformación del sistema energético”, aseguró a Diario de Valdivia.
En este contexto, este lunes 25 de julio, el pellet que se vendía en la sucursal de Ecomas ubicada en la calle Carlos Andwanter en Valdivia, fue trasladado a Sodimac, donde durante esta misma tarde se registraron largas filas.
“Ecomas, continuará con las ventas de pellet por internet y con sus despachos a domicilio, comprometiéndose a no subir sus precios durante esta temporada de invierno”, aseguró el seremi de Energía Los Ríos, Leonardo Faúndez, al realizar el anuncio.
Además, "seguirá en funcionamiento el nuevo punto de venta en Isaflor de Las Ánimas, tal como se anunció a partir de esta semana, para llegar a más familias", agregó.
Pensando en soluciones posibles, la ingeniera Leyton propone “sumar las briquetas” al panorama energético de los hogares.
“Las briquetas que son una opción de madera comprimida que no es tan específica como el pellet, que tiene estándares específicos. Las briquetas son material que se genera a partir de la misma madera que está un poco más comprimida”, explica.
"Se podría considerar a distintos aserraderos o donde se pueda dar una vuelta en términos de economía circular, por ejemplo, donde estos restos de madera podrían ser un desecho, talvez vincularlo con otra industria y otros proveedores para poder hacer estas briquetas como punto medio", agrega.
“Me parece que esa podría ser una solución de corto a mediano plazo, fomentar el uso de las briquetas”, concluye.
“Como Seremi de Energía, estamos desarrollando estrategias con la Asociación Chilena de Biomasa para poder volver a tener un abastecimiento normal de pellet en la región", aseguró Faúndez hace unos días.
"Por esta razón, estamos visitando a las plantas productoras de este producto y, además, monitoreando el abastecimiento en la región”, agregó.
Por su parte, Antonio Minte, gerente de la Asociación Chilena de Biomasa, ha hecho un “llamado a la tranquilidad dentro de lo posible”.
"Entendemos la problemática actual. No se ha parado la producción a nivel nacional, llegará todos los días a todas las ciudades, en especial a la región de Los Lagos, porque es la de mayor consumo en el país”, sostuvo.
El seremi reiteró el llamado a la comunidad “a comprar a consciencia y con responsabilidad, para que todas las familias puedan acceder al producto. El pellet seguirá llegando todas las semanas y eso lo estamos monitoreando desde el Ministerio”.
En cuanto a las denuncias, la autoridad recordó a la comunidad a denunciar los sobreprecios que no sean acordes al valor que establecen los productores de pellet, que van del orden de los 3 mil 900 pesos a los 5 mil 300 pesos en locales formales y establecidos, lo que puede variar dependiendo de la marca y la cantidad de kilos, debido a que existen en el mercado bolsas que van desde los 15 a los 20 kilogramos.
En este contexto, hace dos semanas el senador Iván Flores ofició a ministerios de Economía, Medio Ambiente y Desarrollo Social para solicitar creación de políticas de Estado que puedan subsanar los reiterados episodios de quiebres de stock de pellets en el sur de Chile.
“Lamentablemente vuelve a ocurrir lo que ya habíamos denunciado hace un tiempo. Nuevamente las familias y las personas más vulnerables vuelven a quedarse sin calefacción”, dijo el senador.
“En buena hora la institución pública les hace un recambio gratuito de calefactores por más eficientes y menos contaminantes. Pero si no hay pellets en el mercado, se quiebra el stock, si se abusa con los precios subiéndolos dos o tres veces su valor”, agregó.
En el oficio presentado a los diferentes ministerios, Flores solicita que se definan políticas de Estado para estimular la creación de empresas, cooperativas u otras formas de organización, que permitan asegurar este abastecimiento para las familias más vulnerables.
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