Un sobrevuelo sobre la zona afectada por remociones de terrenos tras el sismo de magnitud 4,7 ocurrido el jueves 11 de febrero, con epicentro en la comuna de Panguipulli, realizaron en esta jornada autoridades regionales a fin de evaluar la situación actual y futura en el sector.
Este sobrevuelo se efectuó sobre el sector cordillerano de Neltume, Choshuenco y Puerto Fuy, según lo indicado por el Intendente Regional Cesar Asenjo, destacando que este reconocimiento se realizó junto al Director Regional de Onemi, “para fortalecer el sistema de protección civil ya que ayer nos desplegamos territorialmente, y también con el especialista de Sernageomín para verificar la situación in situ y poder fortalecer un plan de acción”, señalo el Intendente.
Daniel Epprecht, Director Regional de Onemi, detalló que este sobrevuelo permitió identificar "una serie de remociones en masa, se sacaron bastantes fotografías que serán analizadas por personal de Sernageomín para ver cuáles serán los cursos de acción”, dijo.
MAYOR RIESGO SON LAS LLUVIAS INTENSAS
Epprecht explicó que algunas de estas remociones ocurrieron en sectores menos poblados, en tanto otras están más cerca, y próximamente también serán revisados en terreno junto a los propietarios de los terrenos afectados, para definir los cursos de acción ante las primeras lluvias “ya que hay algunas de estas remociones en masa que cayeron justo donde pasan algunos ríos”.
En tanto Felipe Carrasco, geólogo de Sernageomín, precisó que el sismo de ayer se produjo en la traza de la falla Liquiñe-Ofqui, que es “una zona de fallas, de las más grandes que hay en Chile y en la cual se han producido históricamente muchísimos sismos”, y precisamente en el último sismo se produjeron remociones en masa.
Asimismo el geólogo advirtió que el mayor riesgo ahora es que “producto de intensas lluvias se pueda movilizar ese material por las quebradas y por los valles donde se produjo estos deslizamientos y caídas de roca”.
Dado lo anterior se evaluará en detalle las condiciones de las zonas de riesgo, y trabajar con los vecinos “y educarnos mutuamente en qué hacer en casos de emergencia en que estas remociones se reactiven producto de las lluvias o producto de nuevos sismos”, concluyó el profesional de Sernageomín.
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