Café la Última Frontera se apresta a reabrir sus puertas

Con su nueva ubicación en Isla Teja el tradicional establecimiento espera retomar sus 25 años de historia.

Tras el violento incendio intencional que lo redujo a cenizas, el Café La Última Frontera está próximo a reabrir sus puertas.

Esta vez en un nuevo y remozado recinto en calle Los Tilos de Isla Teja, donde con una nueva administración en manos de los hijos de la recordada empresaria Marisol Cumsille, esperan seguir con una tradición de 25 años en el ambiente valdiviano.

Cambia la ubicación, el entorno y la casa, pero sus administradores desean mantener la misma mística que tuvo el establecimiento de calle Pérez Rosales, en aquella casona que fue centro de entretención, de la buena cerveza y conversaciones.

Así lo reitera a Diario de Valdivia, Simón Wilhelm, hijo de Marisol, quien se ha puesto al frente de esta nueva aventura.

“Lo del incendio fue tremendo. Las llamas acabaron con un emprendimiento familiar de años. Entonces con mi hermana nos propusimos que no termine esta historia acá, seguir con esta historia del café en otro espacio, pero con árboles, con lo mismo estilo que teníamos”, comenta.

El local de calle Los Tilos 091 se ubica en un sector tradicional, rodeado de árboles y naturaleza. “Este es un muy bien lugar que invita a estar en la terraza”, agrega.

Simón reconoce que el proceso de ponerse de pie es largo y doloroso, aunque había que dejar la pena atrás. “Siempre me dije que tenía que reabrir nuestro local. Y ahí empezamos a encontrar la casa, la estábamos remodelando, ya estábamos listos para la remodelación. Tienen que llegar ahora los muebles. Y ya esperamos partir en 10 días más”.

-¿Ha sido muy complicado desde el punto de vista del empresario volver a partir?

“Sí, muy difícil. O sea, ha sido bastante difícil, partiendo por el tema económico, porque tuvimos que hacer todo desde cero. Desde el sistema eléctrico, cocina, baldosas, todo desde cero. Y estamos haciendo todo bajo la norma. Afortunadamente cuento con el apoyo de mi familia, mi novia, que me han acompañado bastante; al igual que mis amigos. Gracias a todos ellos estamos acá volviendo a vivir”.

- ¿Cómo Marisol lleva todo este proceso?

“Ahora está contenta, porque ya vamos a abrir de nuevo, pero tuvo unos meses con mucha pena. Yo seré la cara visible de esto. También va a estar mi hermana y todo un equipo.

-¿Cuántos días faltarían para que la comunidad valdiviana y turistas regresen a La Última Frontera?

“Espero que unos 10 días para poder funcionar. Por supuesto, esto va a estar revisado por todos los medios para que todos sean bienvenidos al regreso de La Última Frontera”. 

Wilhelm reiteró que el café tendrá lo mejor de la gastronomía local representado en sus tradicionales sánduiches, colaciones, platos vegetarianos, veganos. 

“Habrá sorpresas, vamos a tener productos nuevos, que eso todo se va a ver para la inauguración de nuestro local. Por supuesto, vamos a seguir con las cervezas artesanales valdivianas y de productores regionales”, indica.

“Queremos potenciar lo valdiviano y es así como tendremos licores producidos localmente, vodka y gin valdiviano, y queremos apoyar todo lo que sea valdiviano y de la región”, comenta con entusiasmo.