El pasado jueves 9 de mayo se realizó un encuentro en la localidad de Loncopán, una mateada en la que se hizo entrega a la comunidad de la marca que en adelante los identificará.
La actividad, realizada en la antigua casona patronal del sector, que posteriormente funcionó como escuela pública, estuvo encabezada por el alcalde Claudio Lavado, la presidenta de la Junta de Vecinos de Loncopán, Loreto Ruiz y con presencia del concejal Fernando Flández.
En la ocasión se conversó y se registraron algunos testimonios de vecinos y vecinas, quienes compartieron sus historias de vida en su querida localidad.
El alcalde Lavado, simbólicamente entregó a la presidenta de la junta vecinal los distintos elementos que ahora llevan la marca Loncopán, como pendones, banderas y jockeys, todo diseñado en forma participativa en el marco del proyecto “Loncopán: Estudio diagnóstico de caracterización, identidad y puesta en valor del patrimonio cultural rural para el desarrollo sustentable y sostenible”.
Dicho proyecto fue postulado por la Municipalidad de Futrono y ejecutada por la Asociación Patrimonial Cultural de la Región de Los Ríos.
Loreto Ruiz, presidenta de la Junta de Vecinos Loncopán, destacó la actividad enfatizando el valor identitario que significa para la comunidad loncopanina.
“Veníamos con un Loncopán muy caído, muy olvidado en el tiempo y con esto nos dan ganas de seguir trabajando, incentivando a la comunidad a hacer más cosas, si nosotros podemos hacer muchas cosas, pero teníamos que tener un pequeño incentivo o un gran incentivo, que fue esto, la entrega de esta marca”, señaló.
“En este colegio, que era la casona, pasaron muchas generaciones de estudiantes, estuve yo, estuvieron muchas personas, entonces cuando vienen otras personas a rescatar lo que tú dejaste perder, te das cuenta de lo hermoso, de lo que tienes y lo que estabas a punto de botar”, explicó la dirigenta valorando el proyecto de puesta en valor del patrimonio local.
Loreto Ruiz se mostró muy optimista de los futuros logros de la comunidad, que se presentará con su marca en cada lugar al que vayan. “Demostrar que aquí está Loncopán y Loncopán sigue vivo”, recalcó.
Por su parte, Estela Cuvertino, encargada de la sección de Patrimonio Turístico, Cultural y Arqueológico de la Unidad de Cultura de la Municipalidad de Futrono, se mostró satisfecha por este logro y la recepción de la comunidad.
“Al terminar el proyecto de patrimonio, la idea era que Loncopán quedara con una marca para que sea parte de su identidad, algo simple que salió de ellos, de su propia historia”, explicó Cuvertino.
Asimismo, recordó que en el proceso de creación de la marca fue memorable el descubrir que la antigua campana de bronce que hoy permanece en lo que fue la escuela, era un elemento de un peso histórico tremendo, ya que en un inicio marcaba los horarios laborales en la antigua hacienda Loncopán y años después era el sonido típico de la escuela.
Para una parte de la comunidad representaba el rigor y la dureza del trabajo en tiempos que poco y nada se sabía de leyes laborales en el campo y por otra parte, para nuevas generaciones, representa la nostalgia de la infancia en la escuela.
“La campana al final quedó, pero para llegar a consensuar eso pasó mucho tiempo, para la comunidad era positivo y a la vez negativo, trae recuerdos buenos y recuerdos malos, pero a pesar de todo eso ahora está en la marca como un elemento que une”, concluyó Cuvertino.
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