Que familias de Valdivia y Mariquina aprendan a crear huertos orgánicos sinérgicos y conozcan la técnica del compostaje, es el objetivo de un proyecto que ejecuta el Consejo Comunal de la Discapacidad de la capital regional, gracias al Fondo de Fortalecimiento de las Organizaciones de Interés Público (FFOIP), del Ministerio Secretaría General de Gobierno.
Los talleres comenzaron hace algunas semanas, y este sábado, el Seremi de Gobierno Pedro Lamas se trasladó hasta San José de la Mariquina para conocer la experiencia de dos familias que están siendo beneficiadas con este taller, el cual está especialmente dirigido a personas en situación de discapacidad, pero que considera a todo el grupo familiar.
“Como Gobierno estamos muy contentos de ver cómo este proyecto avanza firmemente y ya muestra sus resultados. El trabajo con estas huertas orgánicas sirve como terapia para quienes tienen algún tipo de discapacidad, pero se extiende a toda la familia, ya que todos pueden participar. Además, se crea una herramienta con la cual pueden emprender, logran recursos adicionales para el hogar. Esto es un buen ejemplo del espíritu que logramos a través del Fondo de Fortalecimiento, donde se potencian las cualidades de una comunidad, permitiéndoles mejorar su calidad de vida”, indicó el Seremi Lamas.
Verónica Lovera es la coordinadora del proyecto. Ella explicó que el Consejo Comunal de la Discapacidad de Valdivia agrupa a 24 organizaciones. Entre ellas hay personas con discapacidades de todo tipo, incluyendo físicas y mentales. Además, tienen en Mariquina como filial a la Agrupación de Personas Discapacitadas Autonomía, Vida y Salud, sumando en total 577 socios en ambas comunas. Cabe consignar que según la Encuesta II ENDISC (Estudio Nacional de Discapacidad), en la región de Los Ríos hay un 23,8% de incidencia de la discapacidad, siendo superior al promedio nacional (16,7%)
“El objetivo de este proyecto es proveer a las personas en situación de discapacidad con herramientas ecológicas, utilizando metodologías participativas e innovadoras, que permitan la inclusión ambiental adecuada y eficiente. Es una oportunidad para trabajar en rehabilitación, y para olvidarnos un poco de la pandemia. Además, este trabajo apunta a una real inclusión, entonces es como que tuvieran un renacer dentro de este proyecto”, señaló Lovera.
Según el proyecto, esta iniciativa de inclusión orgánica funciona gracias a la labor de un tallerista, quien asiste a los hogares de los participantes para enseñar las distintas técnicas. De este modo, se evitan problemas con las restricciones sanitarias. En las clases, el tallerista enseña técnicas intensivas, las cuales permiten el cultivo de distintos alimentos en poco espacio. Para ello se utilizan productos reutilizables, como botellas de plástico. El objetivo es no desperdiciar nada. Los alimentos objetivos, como alimentos, flores y hierbas pueden ser comercializados por las familias, generando fuentes de ingreso.
Cabe destacar que el Consejo Comunal de la Discapacidad se adjudicó 3 millones 706 mil 574 pesos, de la línea de proyectos regionales del Fondo de Fortalecimiento de las Organizaciones de Interés Público (FFOIP). Estos proyectos regionales pueden recibir hasta 4 millones de pesos y deben ser ejecutados en al menos dos comunas de la región. En este caso, Valdivia y Mariquina. Con los recursos obtenidos se pagan los honorarios del tallerista, los costos de traslado y la compra de insumos para la realización de las capacitaciones.
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