A fines de octubre se realizó el Primer Encuentro de Escultores en Madera Ruta del Maihue, evento organizado por la comunidad José Calcumil Carillanca, la Junta de Vecinos de Chabranco y la Agrupación de Feriantes Estación Hueinahue y Curriñe, en la comuna de Futrono.
Más que un evento, fue toda una experiencia tanto para la comunidad precordillerana como para los nueve escultores que llegaron desde distintos puntos de Chile y la región a plasmar sus obras para rescatar la identidad del sector.
Una de las esculturas que llamó poderosamente la atención, tanto por el nivel de estética logrado y el mensaje inherente a la obra. Se trata de El Viejo Laurel, al que dio forma el escultor Claudio Díaz, conocido como Claudio Motosierra.
La obra atrapa, es un rostro sereno y antiguo, humano y telúrico al mismo tiempo, un armonioso encuentro entre cultura y naturaleza que se quedó en Maihue para el deleite de residentes y visitantes.
Claudio Motosierra conversó con Diario Futrono, y compartió los detalles del origen de esta singular escultura.
“Somos nueve escultores y a cada uno nos dieron una temática, a mi me tocó un sector, Chabranco, y le presenté mi idea a la gente, un boceto que yo tenía en mi mente, como una leyenda, y me dijeron que no les gustaba mucho”, comenta.
“Ellos dijeron que preferían flora y fauna, y que tenían un tronco especial para eso y que no perdiera su forma de tronco y que fuera plasmando lo que el árbol vivió en su vida”, rememora.
Las exigencias eran altas, pero Claudio no se desanimó y como buen creador transformó el desafío en una propuesta.
“Empecé a imaginarme ese tronco, que era alguien que tenía un espíritu, y de hecho lo tiene, así que ahí nació el espíritu de la madera: El Viejo Laurel. Le hice el rostro grande como simulando su esencia y lo fui rodeando de todas las cosas que en algún momento vivió, miró, sintió”, indica.
De esa forma el escultor agregó aves y otros elementos, imaginando el entorno natural donde el laurel creció y que al final de su vida se transforma en una obra de arte. “La idea era que hablara el mismo tronco, un viejo laurel que cuenta su historia”.
Claudio destaca la participación de la comunidad de Chabranco, quienes pidieron una escultura en particular, así que la obra es un logro conjunto, no solo del escultor.
El artista señala su grata impresión durante el desarrollo del Encuentro de Escultores en Madera, ya que se dio un especial vínculo de las comunidades aledañas al Maihue, con las creaciones que se estaban trabajando.
“La gente amable, gente que necesitaba parece un poquito de cariño, porque esto fue muy emotivo para ellos, algo que no había pasado nunca allí, nos daban las gracias por llevarles una alegría, por rescatar sus tradiciones”, expresa.
De igual forma, llama a que se entreguen todos los cuidados necesarios a esta escultura, para que perdure y sea realmente parte del patrimonio de la zona.
“Que la cuiden, que la mantengan, no la rayen, que valoren el trabajo que se hizo porque es su cultura, su madera, su hábitat, esa madera no se cambió de hábitat”, dijo.
Claudio Díaz dice ser oriundo de Antofagasta, migró a Santiago y posteriormente se fue a la zona de Batuco, Talca, donde comenzó a fabricar figuras de animales en madera después del terremoto del año 2011.
Asegura que hasta ese momento, de trabajo en madera “no sabía nada”.
“Después del terremoto recién conocí una motosierra y ahí me hice un osito, y mi hijo lo vendió y me pidieron otro, y otro. Así empezó Claudio Motosierra”, comenta.
De esa manera siguió el camino de hacer arte en madera con su motosierra, tanto así que incluso hay un libro de su autoría que lleva por título “Motosierra”, lanzado en el año 2021 por Tala Editorial, que es un registro de su trayectoria, al que se puede acceder desde este LINK.
Actualmente Claudio Motosierra continúa trabajando con su talento sobre la madera, y mantiene la esperanza de volver a la zona del lago Maihue. “Nosotros vamos a todos lados y la gente se acerca a tomarse fotos, pero allá en Maihue la gente se acercaba a dar las gracias, eso fue muy especial”, concluye.
Y quizás haya posibilidades de marcar un retorno no tan lejano en el tiempo, ya que Oscar Quintul, presidente de la comunidad José Calcumil Carillanca, adelanta que “pronto puede haber novedades”.
Por ahora las nueve esculturas están en exhibición en el lugar donde fueron creadas, frente al espacio Feria de Maihue, y en el mes de marzo serán distribuidas por la zona precordillerana, marcando la Ruta del Maihue.
Grupo DiarioSur, una plataforma de Global Channel SPA. Powered by Global Channel