El fútbol es un deporte popular en Chile desde fines del siglo XIX y en Valdivia también tiene seguidores, en especial entre la clase trabajadora, y con clubes destacados como Magallanes, Nacional o Iris Comercial.
En el verano valdiviano de 1926, los aficionados a este deporte tuvieron una visita especial de un club de jóvenes santiaguinos que hacía menos de un año decidieron separarse del club Magallanes, el mejor equipo de aquellos años, para formar su propia institución.
Un tal David Arellano junto a sus amigos se reunieron en el Bar Quitapenas y un 19 de abril de 1925 crearon su club, lo bautizaron Colo Colo y poco a poco empezó a hacerse conocido en Santiago.
Más aún cuando inmediatamente se coronó campeón de la Liga Metropolitana de aquel año y en forma invicta, por lo que la prensa lo bautizó como “El Invencible”.
David Arellano era ambicioso. Quería que todo Chile conociera a su club y en enero de 1926 organizó una gira al sur para jugar partidos en Talca, Chillán, Temuco, Valdivia, Osorno y Ancud. Fue su primera gira nacional.
El 17 de enero de 1926 Colo Colo jugó por primera vez en Valdivia un partido amistoso en una cancha de Chumpullo, en Collico y el rival fue el club Nacional, evento que promocionó con anticipación el diario El Correo de Valdivia.
La gira Colo Colo la había comenzado jugando en Talca ante un combinado de los clubes Atlético Comercio y Deportivo Español. El triunfo fue para los caciques por 2-1.
En Chillán, frenaron a David Arellano y su equipo cayó 3-2 frente al Unión FC. Esa fue su primera derrota, pero como era un partido amistoso, no se contó como la primera caída oficial.
En Temuco, los santiaguinos jugaron contra un combinado de la ciudad de la Araucanía y empataron 2-2. Después de eso la siguiente parada era Valdivia.
Según El Correo de Valdivia, el equipo de Colo Colo llegó a la estación de trenes de la ciudad el martes 12 de enero de 1926 en el ferrocarril de las 5 PM.
El matutino de la época dispuso una copa con su nombre para el encuentro, destacando como figuras a Francisco Arellano y Togo Bascuñán por la visita y a Víctor Norambuena y Alfredo Provoste por los locales del Nacional.
El 14 de enero se realizó una velada cinematográfica en el Teatro Edén, edificio ubicado al frente del actual Teatro Regional Cervantes, donde además hubo una exhibición de boxeo y posteriormente, se presentó a todo el plantel de Colo Colo.
En la tienda de “Calzados Rudolf y Hnos.”, en Picarte, se mostró el trofeo en disputa.
El día 17 de enero en los Campos de Sports de Chumpullo se organizó el encuentro deportivo y alrededor de tres mil personas llegaron al lugar, ya sea por vía fluvial o por tierra en góndolas o automóviles de la época.
Hubo partidos de fútbol siete con clubes locales que ganó Escuela Superior y además, se hizo una competencia de postas atléticas, lo que demuestra lo arraigado que estaba ya el deporte por aquellos años en Valdivia.
El Correo dice en su edición de aquellos años que el match de fondo se inició a las 3:50 PM “con los acordes de la banda musical El Ferrocarril que, entre paréntesis, hizo las delicias del público durante toda la tarde”.
De fondo estaba reservado el partido que la afición esperaba con ansias y se dio el pitazo inicial del referí Humberto Fagnilli, venido desde Chillán. El puntapié inicial lo dio la señorita Martha Inés Oliva.
Colo Colo hizo valer su fama del campeón metropolitano y en el primer tiempo se puso en ventaja con goles de José Miguel “Cantimplora” Olguín y Humberto Moreno.
Pero en el segundo tiempo el Nacional entró con aires renovados, descontó por medio de Parada y finalmente empató con gol de Víctor Norambuena para dejar las cosas 2-2 en Chumpullo cuando faltaban seis minutos para el final.
El Correo de Valdivia destacó la actuación del arquero valdiviano de Nacional Alfredo Provoste, quien evitó la caída de su arco en el segundo tiempo.
Según el diario valdiviano, Colo Colo formó con Cataldo; Bascuñán, Bascuñán; Pancho Arellano, Cáceres, Guillermo Arellano; Moreno, Contreras, David Arellano, Arroyo y “Cantimplora” Olguín. Por el Nacional jugaron Provoste; Marín, Toledo; Merino, Peña, Parada; Ortiz, Álvarez, Norambuena, Montesinos y Rosas.
“Los colocolinos científicos, dominadores absolutos del balón, con combinaciones emocionantes, que entusiasmaron al más reacio por el fútbol, mucho entrenamiento y sobre todo, alejamiento absoluto del egoísmo, ante la suprema necesidad del triunfo”, fue el párrafo que El Correo de Valdivia destacó para graficar el espíritu de esos primeros colocolinos que guiaba David Arellano.
Tras el paso por Valdivia, Colo Colo jugó en Osorno y logró un contundente triunfo de 5-2 ante un combinado de dicha ciudad.
Posteriormente el elenco del Cacique se embarcó hacia Chiloé y jugó ante un elenco de Ancud. En la isla, el equipo de la casaca blanca logró un triunfo por 4-1.
Era la primera vez que un equipo profesional de la Liga Metropolitana llegaba a la isla.
El 30 de mayo de 1926, Colo Colo fue derrotado por primera vez, en forma oficial, en Santiago tras caer frente a Santiago Wanderers por 1 a 3 ante 10 mil espectadores en los Campos Sports de Ñuñoa.
Colo Colo quedaría en el imaginario de la afición chilena con la gira internacional que realizó en Sudamérica y posteriormente a España y Portugal, siendo el primer equipo chileno en jugar en Europa.
Fue en Valladolid, donde ocurrió la tragedia, cuando en un partido ante el Real Unión Deportiva un futbolista español golpeó fortuitamente a David Arellano, provocándole una peritonitis traumática no detectada por los médicos.
Arellano falleció el 3 de mayo de 1927, pero con él se forjó la leyenda que luce el club con la barra negra junto a su escudo que indica luto permanente por su primera figura.
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