"Siempre vamos al peor escenario posible, nuestro deber es salvar vidas y bienes”, afirmó el primer comandante del Cuerpo de Bomberos de Paillaco, Harry Álvarez, en conversación con Grupo DiarioSur.
Así fue como el grupo de bomberos de rescate paillaquino partió ante el llamado de emergencia que se activó la mañana del lunes 6 de enero, por un accidente en la Ruta Paillaco-Valdivia, tras volcarse un camión cargado con madera, dejando a su conductor atrapado al interior de la cabina.
Y precisamente, Bomberos encontró un escenario muy complejo, en el que el impacto del vehículo y la posición en la que quedó tras volcar, causó el aprisionamiento del conductor en la estructura, lo que significó largas y delicadas maniobras para rescatar al hombre, sin causarle mayores daños corporales.
La primera evaluación dejó en claro que el conductor se encontraba, principalmente, con sus extremidades inferiores atrapadas, por lo que Bomberos procedió a asegurar el lugar y abrir un acceso para el personal de rescate a fin de que pudieran trabajar.
Ese fue solo el inicio de una difícil labor que se prolongó por siete horas y 15 minutos hasta lograr la liberación del paciente ¿Por qué tanto tiempo? se preguntaron muchas personas que siguieron el desarrollo del procedimiento. La respuesta la entregó Harry Álvarez al relatar cómo se realizó esta difícil tarea.
“El rescate fue un trabajo muy técnico y delicado, nuestra misión era sacar al paciente entero y no tener que realizar una amputación de la extremidad”, indicó honestamente el primer comandante, dando a entender el alto riesgo del procedimiento y la presión que ello conllevó sobre los voluntarios.
Bomberos retiró gran parte de la estructura de la cabina con sumo cuidado. “Luego se procede con la primera técnica llamada desplazamiento de panel frontal, para acceder a la parte baja del camión, una vez realizada esta maniobra se pudo liberar tensión en ambas extremidades inferiores”, indicó.
En todo momento Bomberos trabajó en coordinación y realizando evaluaciones con el Samu y el médico de urgencias de la unidad, todo un despliegue humano, profesional y técnico enfocado en el rescate.
Álvarez señala que, haciendo uso de herramientas hidráulicas y cadenas, se pudo desmantelar la columna de dirección y retiro del volante de la cabina del camión.
“Una vez retirada la primera sección de la columna de dirección se pudo liberar una extremidad (inferior), lo cual también nos permitió tener acceso y visión a la segunda extremidad la cual tenía un nivel de atrapamiento y lesiones de bastante consideración”, dijo.
En ese punto comenzó la etapa más delicada de las maniobras. “Cualquier movimiento no planificado y sin control, hubiese ocasionado heridas catastróficas en el paciente”, afirmó Álvarez.
La constante evaluación hizo entender que se necesitaba el apoyo de una retroexcavadora, con la cual se logró levantar algunos centímetros la cabina, y con ello permitir acceso de los rescatistas desde la parte de abajo de la misma, un nuevo frente que hizo más eficiente la labor.
“Alternando las maniobras de corte, expansión y creación de espacio, es que se logró llegar al punto de atrapamiento, lo cual permitió la liberación del paciente y posterior extracción desde el camión”, precisó el primer comandante.
“El paciente estuvo en todo momento consciente, atendido su estado de salud por personal avanzado de Samu”, explicó.
“En el trabajo de recate trabajaron más de 50 bomberos cumpliendo diferentes roles de operaciones logísticas y puesto médico, con equipos de rotaciones para trabajo continuo”, expresó.
Lo anterior significó que los voluntarios paillaquinos recibieron apoyo directo de los cuerpos de Bomberos de Valdivia y La Unión, lo que permitió el relevo de personal para continuar las maniobras cuando la fatiga dificultaba el trabajo.
El complejo escenario y el reducido espacio en el que trabajó Bomberos explica la demora de varias horas para finalmente rescatar al conductor, quien pudo haber terminado con una extremidad amputada en el mismo lugar.
“Hubo un momento donde el equipo médico en conjunto a Carabineros tomó la determinación de realizar la amputación de la extremidad, pero nosotros como Bomberos habíamos tomado la determinación de sacarlo con todas sus extremidades", afirma Harry Álvarez, seguro de la preparación y profesionalismo de los voluntarios a su cargo.
"En un último intento se logra la maniobra de la liberación completa del paciente”, complementó. La determinación de Bomberos fue crucial, el paciente fue rápidamente trasladado al Hospital Base Valdivia, donde fue intervenido.
“Hubiese sido sencillo decir que el nivel de atrapamiento impide su recate y se hubiese dado la orden inmediata por el médico de amputar, pero como bomberos no podemos, nuestra vocación es más grande y nuestra misión era salvaguardar a esa persona", reafirma Álvarez.
Actualmente, trascendió que el conductor, identificado como Rony Ojeda, con domicilio en Valdivia, mantiene fracturas aunque sin riesgo vital.
Grupo DiarioSur, una plataforma de Global Channel SPA.
Powered by Global Channel
206542