Este viernes medio locales publicaron una nota en la que un paciente de la Clínica España de Valdivia denunciaba que, luego de una intervención quirúrgica de un tratamiento conducto, comenzó a notar un intenso dolor en su mandíbula durante una de las sesiones.
La especialista a cargo de la intervención explicó a su paciente que se "le había pasado la mano", sin embargo, el persistente dolor motivó a Cristian Carvajal a consultar en otro centro odontológico, donde tras una radiografía, pudo comprobar que tenía incrustado un pedazo de lima.
En conversación con Diario de Valdivia, Cristian Carvajal declaró que en este momento existe una querella criminal por cuasidelito de lesiones contra la dentista María Belén Stocker y una demanda civil en contra de la clínica España por daños.
“Todavía tengo el trozo de lima alojado en la mandíbula. No se puede sacar y eso me ha traído un montón de perjuicios. He estado con tratamiento psicológico por esta situación”, señaló Carvajal.
De acuerdo a lo narrado por el querellante, en la contestación de la querella el abogado defensor de la ortodoncista, si bien reconoce el hecho, aduce a que el pedazo de lima se alojó en la mandíbula del paciente por su culpa.
Por otra parte, el gerente de la clínica, Raúl Vega, tampoco se haría responsable de esta situación, argumentando que el centro de atención sólo arrienda el espacio a profesionales.
“Yo le pagué a la clínica, no a la doctora Stocker. Se quieren desentender de un asunto contractual pero en ese sentido no es así. Todos los gastos fueron cancelados a la clínica”, agregó Carvajal.
Diario de Valdivia se puso en contacto con la Clínica España pero declinaron de realizar mayores declaraciones.
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