Reconocen a madres tutoras de Corral: cobijan a estudiantes de sectores alejados

Municipio de Corral reconoció la entrega de las hermanas Teresa y Blanca Huala. Conoce su historia.

Mediante un agradable almuerzo, la Municipalidad de Corral realizó un reconocimiento a dos madres tutoras pertenecientes al Programa Residencia Familiar Estudiantil de Junaeb, quienes actualmente cobijan en sus hogares a tres estudiantes que provienen de localidades alejadas. 

Teresa Huala y Blanca Huala, son dos hermanas que llevan 29 años en el programa, ofreciendo su hogar a estudiantes que necesitan trasladarse para continuar sus estudios. En su hogar los escolares reciben alojamiento, alimentación y principalmente apoyo afectivo.  

El director regional (s) de Junaeb, Roberto Giubergia destacó la iniciativa: “se trata de valorizar un programa centrado en el bienestar socioemocional de los estudiantes, donde la familia tutora cumple un rol primordial porque contribuye al desarrollo y el proceso educativo de niñas, niños y jóvenes que deben desplazarse de sus hogares porque no existe oferta educacional”. 

A su vez, el director (s) del Departamento de Educación Municipal, Álvaro Galindo, explicó que este hito marca un cierre de proceso que anualmente se realiza en la comuna.

Trabajo silencioso

“Gracias a este programa nuestros estudiantes pueden concretar el sueño de seguir estudiando y proyectar su vida. Es un trabajo silencioso y muy lindo que hacen las familias tutoras porque reciben a los estudiantes como si fueran parte de su hogar”, expresó.

Durante la actividad también se entregó un reconocimiento al esfuerzo de los tres estudiantes que tienen el beneficio. Al respecto, Francisca Saldivia, estudiante del Liceo Carlos Haverbeck dijo que “el programa es un apoyo muy importante para mí, ya que vengo de una localidad donde no hay liceo. Encontré una familia y por eso estoy muy contenta porque me siento como en mi casa” 

El programa Residencia Familiar Estudiantil se ejecuta en convenio con la Municipalidad de Corral y beneficia a tres estudiantes, con una inversión anual de cercana a los tres millones de pesos.  

La iniciativa que se ejecuta a través de las familias tutoras, entrega alojamiento, alimentación, apoyo pedagógico y afectivo a estudiantes de educación básica (7°y 8°), media y superior en condición de vulnerabilidad, que no cuentan con oferta educacional completa y/o de su interés en sus lugares de residencia.