La innumerable lista de reglas que ha traído el endurecimiento de las cuarentenas, continúa causando problemas, conflictos y confusiones. A la rectificación que tuvo que hacer el Minsal sobre la permanencia del tabaco como un “bien esencial”, durante la jornada de ayer se sumaron las críticas de propietarios de moteles a las fiscalizaciones y limitaciones de las que han sido objeto.
Ante este hecho, la Seremi Metropolitana de Salud, Paula Labra, otorgó el derecho a los moteles de funcionar durante Fase 1, pero con la obligación de que los clientes se dirijan a ellos con su debido permiso de desplazamiento y de pernoctar en el lugar.
En el plano local, y de acuerdo a declaraciones entregadas a Radio Bío Bío, distintos empresarios y trabajadores del rubro se manifestaron respecto de este tema.
Por una parte, desde el Motel Kilómetro 8, en la salida sur de Valdivia, cuestionan el hecho de que haya que pernoctar, dado que su principal entrada de recursos se da de día y con arriendos de 3 horas.
“No es muy buena la solución que proponen. Si nos dan una solución que nos permita funcionar como hotel, no se arregla la situación”, señaló Sergio Hidalgo.
Un poco más satisfecho, en tanto, se mostró el propietario de Moteles El Arenal, Richard Hinrichsen, valoró el permiso otorgado por el gobierno, recalcando la necesidad de continuar funcionando por la salud mental de los ciudadanos.
“El 80% de los chilenos viven en casas de menos de 90 metros cuadrados, con 3 o 4 hijos, muchas veces con suegros, etc. Entonces yo creo que hoy por salud mental estos locales deberían mantener sus puertas abiertas”.
Cuéntanos cuál es tu posición con respecto a esta delicada situación que conjuga ciertos grados de libertad de cada ciudadano, pero que, al mismo tiempo, merma la efectividad de las cuarentenas.
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