Estudiantes del Liceo San Conrado participan en concurso de innovación

El concurso Savialab termina en octubre y los equipos ganadores participarán de una gira tecnológica con todos los gastos pagados

Estudiantes del Técnico en Servicios de Alimentación Colectiva del Liceo San Conrado están participando en un concurso que busca promover metodologías para la innovación y el emprendimiento. 

Se trata de Savialab, un concurso impulsado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Minagri, ejecutado por DILAB de la Escuela de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Chile. A la vez, la iniciativa es un curso cuyo objetivo es que los jóvenes de liceos técnicos aprendan en conjunto a diseñar soluciones innovadoras a problemas que afectan su diario vivir.

El concurso partió en el mes de abril con una capacitación para los profesores y posteriormente con los estudiantes. Sergio Montes docente del Liceo San Conrado está trabajando oportunidades de innovación en el contexto de la alimentación saludable al interior del colegio con estudiantes del cuarto medio Técnico en Servicios de Alimentación Colectiva. Del total, dos grupos pasaron a la siguiente fase, se trata de Evelyn Rebello, Bárbara Coñuepán, Angelo Meser y Josué Galarce, con la propuesta "Mejorar la calidad de los alimentos ofrecidos a los jóvenes"; y Sara Ibáñez, Almendra Sandoval, Egon Schnabel, "Promover, producir y vender alimentos ricos en fibra vegetal".

Claudio Soler Álvarez, representante Zonal Sur de FIA, cuenta que la iniciativa nace hace unos cuatro años cuando el Ministerio de agricultura se da cuenta de que si queremos producir algún cambio en la agricultura debemos acercarnos a los jóvenes, sobre todo de los liceos del sector. Entonces realiza "un primer diplomado para profesores y directivos en emprendimiento e innovación y a ese grupo, que en la región hay uno, se le invitó a que llevar sus conocimientos al interior del aula, es así como nace el concurso Savialab".

La competencia se está realizando paralelamente en dos regiones del país: Bio Bio y Los Ríos, y cada año se realiza en distintas regiones. Como parte de las actividades que contempla, el pasado jueves 30 de junio se desarrolló un campamento tecnológico en Futrono, hasta donde llegaron participantes de liceos técnicos de toda la región. Gabriela García, Coordinadora del proyecto Savialab y Gerente de Transferencia del área de Diseño e Innovación de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Católica, explicó que durante la jornada los docentes analizaron el trabajo realizado hasta ahora y reflexionaron acerca de la inclusión. En tanto los jóvenes trabajaron en tres líneas: diseño de servicio, comunicacional y prototipado.

"Esto tiene que ver con una nueva forma de enseñar: una invitación para que los jóvenes se descubran como actores de su futuro, de su desarrollo y los profesores se sientan parte de un proceso formativo real, en términos de desarrollar ciertas habilidades, ciertas competencias conductuales y no solamente traspasar información", señala con convicción Claudio Soler. Esperan "generar un cambio cultural, que la innovación y el emprendimiento pasen a ser parte del vocabulario normal de los profesores y estudiantes de estos liceos agrícolas, independiente si están en localidades muy apartadas, que se sientan parte de un proceso de transformación y de cambio que la agricultura necesita y que son ellos los llamados a hacerlo. Nos interesa llegar a estos jóvenes porque van a ser los que van a mantener la identidad cultural del campo y que en definitiva es la identidad cultural del país".

En cuanto al campamento tecnológico, Sara Ibáñez dice que les "ha ayudado a entender mejor lo que tienen que hacer en esta segunda etapa del concurso". "Tenemos más ideas sobre cómo poder ir armando nuestro proyecto, cómo seguir con el prototipo, cómo tenemos que ir haciéndolo y dándole solución al problema que tenemos" señala su compañera Evelyn Rebello. 

El concurso Savialab termina en octubre y los equipos ganadores participarán de una gira tecnológica con todos los gastos pagados. La finalidad de este viaje es que los ganadores tengan la oportunidad de conocer instituciones de alto nivel que se dedican a la innovación.